Toyo Ito · 1941 | HUELLAS DE ARQUITECTURA

A sus 76 años, el arquitecto japonés Toyo Ito acaba de recibir la Medalla de Oro 2017 de la Unión Internacional de Arquitectos (UIA), un premio más que engrosa su palmarés en reconocimiento a su carrera profesional. Su primer estudio abrió en 1971, labrándose poco a poco un prestigio en su país natal, en el que ya es reconocido como cantera de prometedores arquitectos jóvenes de Japón, como son Kazuyo Sejima y Ryue Nishizawa (SANAA).

Por sus manos pasan gran diversidad de edificios, desde viviendas, bibliotecas, centros culturales, teatros, museos, oficinas… todo un repertorio de respuestas ingeniosas adaptadas a cada circunstancia y entorno, apostando por una modernidad sin ataduras estilísticas, lo que por otro lado convierte su obra en difícil de clasificar. Acostumbrado a la densa metrópolis japonesa, Toyo Ito suele referirse a la arquitectura como “ropa” para la población urbana contemporánea, una piel que ejerce de filtro entre la vida pública y la privada. Sus proyectos suelen reflejar una gran capacidad de síntesis, en los que esa piel se convierte en estructura, dando forma a espacios interiores que transmiten serenidad. No me cabe duda que esta actitud venga heredada de la tradición japonesa, más aún si tenemos en cuenta las palabras del jurado cuando recibió el Pritzker en 2013, refiriéndose a la “dimensión espiritual y poética que trasciende todas sus obras”. A continuación os ofrezco un listado de su obra más destacada, que ya se irá analizando más adelante.